Espadas pide a la vicepresidenta para la Transición Ecológica el respaldo del Gobierno para una estrategia de inversión en Sevilla para la lucha contra el cambio climático a través del plan de actuación de Emasesa, la rehabilitación energética y el fomento de la movilidad sostenible

El plan de actuación diseñado con Emasesa contempla una decena de proyectos divididos en tres grandes líneas de actuación y alcanza un presupuesto total de 393 millones de euros

La propuesta incluye el avance en sistemas de transporte público y movilidad sostenible así como el impulso de la rehabilitación energética de viviendas como fuente de generación de empleo

Fuente: Ayuntamiento de Sevilla

Reunión con la vicepresidenta de Transición Ecológica

El alcalde de Sevilla y presidente de Emasesa, Juan Espadas, y la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, han mantenido este miércoles un encuentro con el objetivo de establecer una línea de trabajo conjunta para el desarrollo de una estrategia para el área metropolitana de Sevilla centrada en la lucha contra el cambio climático a través del programa de actuaciones diseñado por Emasesa; de la transformación urbana de barrios a través de reurbanizaciones y de la rehabilitación energética y de un modelo de movilidad sostenible. El objetivo es por tanto lograr el apoyo económico estatal así como facilidades para el acceso a financiación europea y al uso de recursos propios como el superávit.

“Tenemos un objetivo ambicioso que es lograr que los proyectos para la reactivación económica y social respondan a un modelo de pacto verde europeo que es el que se ha marcado como línea básica de este mandato europeo. La ciudad de Sevilla puede ser la plataforma para plantear proyectos viables que sean receptores de fondos europeos y que sirvan para esa reactivación. Hemos analizado todos los proyectos que tenemos en marcha en relación con la emergencia climática y la gestión del agua como elemento básico”, explicó el alcalde de Sevilla, Juan Espadas.

Con este objetivo, el alcalde ha presentado a la ministra el plan de actuación diseñado con Emasesa con una decena de proyectos divididos en tres grandes líneas de actuación y que alcanza un presupuesto total de 393 millones de euros con el objetivo de que la implicación del Ministerio de Transición Ecológica permita reforzar y ampliar las actuaciones programadas y con financiación garantizada por Emasesa. Estas incluyen intervenciones para mejorar la eficiencia en la gestión del agua, transformaciones urbanas y nuevas infraestructuras de canalizaciones ante posibles inundaciones y de economía circular con centrales hidroeléctricas. A esto hay que añadir el plan de mejora de la red de aguas residuales ya en marcha en colaboración con la Junta de Andalucía.

Emasesa mantiene en estos momentos tres grandes líneas de actuación para las que se ha pedido colaboración al Ministerio. En primer lugar, La mejora de la eficiencia del ciclo integral del agua en zonas de escasez mediante políticas de reducción del consumo de agua y de la energía usada, la búsqueda de nuevos recursos como la captación de aguas subterráneas y fuentes de energía limpia, así como el fomento de la economía circular y protección de la biodiversidad, de forma que aumenten las garantías de abastecimiento de la población, tanto en cantidad como en calidad, y se pueda proteger  el medio ambiente buscando beneficios compartidos. Esta línea se concreta en proyectos de renovación de las redes (40 millones); reducción de la demanda (15 millones de euros); infraestructuras para la obtención de agua subterránea y recarga de acuífero (15 millones) y restauración y protección de las cuencas (15 millones), infraestructuras generación energía Hidroeléctrica (8 millones), gestión de lodos: 18 millones y actuaciones para el uso de aguas regeneradas (cinco millones). A esto se añade el plan de Optimización de Sistema de Depuración (218 millones de euros) ya aprobado en colaboración con la Junta de Andalucía.

La segunda línea de actuación está centrada en el objetivo de configurar ciudades más sostenibles y habitables. En este caso, se trata de desarrollar Experiencias piloto ya que las mejoras de infraestructuras puede ser el motor de cambio que ayude a la transformación de estas implantando modelos replicables. La mejora de las infraestructuras del agua incluirán suelos drenantes con zonas de biorretención que tengan un doble objetivo: favorecer la recarga de acuífero y disminuir la cantidad de agua bombeada a la Edar, con el consiguiente ahorro de energía y disminución de emisiones, así como uso de pavimentos con materiales foto catalíticos y foto absorbentes y el aumento de zonas de sombra que ayuden a paliar los efectos de las olas de calor. Se trata de transformar la realidad mediante el ciclo urbano del agua. Esta transformación supone una mejora de la calidad de vida de las personas y de la calidad ambiental y puede ser un modelo de recuperación de zonas en riesgo de exclusión social. En este sentido, se ha presentado al Gobierno central la propuesta de intervenir en seis calles de un barrio con riesgo de exclusión social por un importe de 24 millones de euros.

Por último, se ha planteado una línea de actuación para evitar el riesgo de inundaciones. El objetivo es lograr la mejora de la capacidad de respuesta de las redes de saneamiento, el uso de técnicas de drenaje urbano sostenible y tanques de retención y la adecuación de los puntos de alivio. Todos estos sistemas ayudan a proteger además los medios receptores ya que disminuyen la contaminación que llega en estos episodios, en unos casos porque laminan la entrada de contaminantes y en otros porque directamente la eliminan contribuyendo a su vez a la mejora del entorno. El proyecto de Emasesa prevé procesos de reforestación y regeneración de riberas, monitorización en tiempo real, sistema de drenaje sostenible, implantación de depósitos de retención de aguas pluviales, o la adecuación de vertidos para la reducción y eliminación de residuos sólidos. Las actuaciones se concretan en una inversión de 35 millones de euros en la cuenca vertiente y de otros diez millones en la restauración de riberas.

Sevilla y su entorno metropolitano son un claro ejemplo de innovación y de compromiso medioambiental desde lo local, como demuestran  que fuera la primera Ciudad española con una declaración de emergencia climática aprobada por el Ayuntamiento de Sevilla en julio de 2019 , como el posterior diseño y elaboración por parte de EMASESA, la empresa metropolitana de aguas de Sevilla de un ambicioso programa de 50 medidas para la lucha contra el cambio climático para adaptar el servicio de aguas a este escenario.

Su ejecución supone una oportunidad de demostrar el compromiso de las ciudades con la nueva filosofía verde que impregna las decisiones de los estados y de las grandes instituciones supranacionales. Y es, por tanto, esencial para hacer de Emasesa un ejemplo en el sur de Europa de empresa 100% comprometida con las actuaciones diseñadas desde el Gobierno Central para hacer frente a la emergencia climática.

En la reunión, además, el alcalde ha trasladado a la ministra la decisión del gobierno de la ciudad de avanzar en sistemas de transporte público que representen una movilidad sostenible como el tranvía, el uso de la bicicleta o la limitación de acceso de vehículos privados en distintas zonas como el conjunto histórico.

Por último, se ha abordado la importancia de impulsar proyectos de rehabilitación de energética de viviendas de la ciudad que es una línea estratégica de generación de empleo y actividad económica y al mismo tiempo de mejorar la vida de una población en riesgo de exclusión social como es la barriada de Los Pajaritos.

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