El abastecimiento consiste en hacer llegar el agua potable a los puntos de demanda (viviendas, comercios, industrias, etc.) en perfectas condiciones de calidad y salubridad. Este proceso se realiza a través de la red de distribución.
La red de distribución comprende las infraestructuras de almacenamiento en depósitos y las tuberías que suministran el recurso hasta cada punto de demanda. Tras su potabilización, el agua se almacena en depósitos lista para su uso y consumo. Nuestra red de abastecimiento cuenta con 28 depósitos que permiten almacenar el agua apta para el consumo y suministrarla a la red de distribución.
A través de la red de distribución el agua almacenada se transporta hasta los hogares e industrias mediante la red de abastecimiento, que está dotada con infraestructuras electromecánicas que regulan el caudal, la presión y la calidad del agua suministrada entre otros parámetros. Esto garantiza el servicio a la población.