La Avenida de la Cruz Roja y su entorno contarán con cuatro zonas públicas de estancia con sombra y climatizadas con un sistema innovador y sostenible a través del enfriamiento del agua, en una apuesta por un modelo de ciudad que lucha contra el cambio climático

Jaime Palop, consejero delegado de Emasesa: “El cambio climático va a seguir siendo el problema global cuando desaparezca la pandemia”

EMASESA junto al Ayuntamiento de Sevilla, la Universidad de Sevilla, la empresa SDOS y EFEverde desarrollarán, dentro del proyecto Life Watercool, que cuenta con financiación europea a través del programa Life, la reurbanización de la avenida de la Cruz Roja que contará con hasta cuatro zonas de estancia con sombra y climatizadas en el Distrito Macarena, a través de la implantación de un proyecto piloto de investigación e innovación que emplea un proceso de enfriamiento y almacenamiento de agua fría para rebajar la temperatura. Estas áreas de estancia estarán ubicadas en el patio del colegio público Arias Montano, en la plaza ubicada entre las calles Manuel Villalobos y Doctor Jiménez Díaz, en la zona de juegos infantiles de la plaza Manuel Garrido y en las marquesinas de las paradas de autobús de la calle Manuel Villalobos.

La delegada del distrito Macarena, Clara Macías, el delegado de Transición Ecológica, David Guevara, del Ayuntamiento de Sevilla  el consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop; el catedrático de la Universidad de Sevilla y director del proyecto Servando Álvarez; y el representante  de la empresa SDOS, Javier Montilla, y el director de EFEverde Arturo Larena han participado en el Hogar Virgen de los Reyes en la presentación y el lanzamiento de esta parte del proyecto de innovación y  transformación urbana de la Avenida de la Cruz Roja y las calles Jorge Montemayor, Doctor Jiménez Díaz y Manuel Villalobos. En su conjunto la intervención, el proyecto LIfe Watercool que cuenta con financiación europea, tiene un presupuesto de partida de casi 9 millones de euros que incluye las obras de peatonalización y reurbanización (licitadas por 7,1 millones), la generación de nuevas áreas de estancia, la investigación y desarrollo de las técnicas o el carácter divulgativo del proyecto.

El consejero-delegado de Emasesa, Jaime Palop apostó en su intervención por no bajar la guardia ante el cambio climático:” Tenemos que estar preparados cuando suba la temperatura en Sevilla, y lo estamos haciendo con proyectos como Cartuja Qanat: , otro proyecto innovador cofinanciado por la unión Europa para combatir las islas de calor, reverdecer la ciudad y favorecer el disfrute de sus calles…” recordando al mismo tiempo que “Las experiencias anteriores basadas en el agua servirán para adaptar Sevilla al cambio climático”

El proyecto de transformación urbana completa de la avenida de la Cruz Roja y las calles Jorge Montemayor, Doctor Jiménez Díaz y Manuel Villalobos incluye la reurbanización completa, un proceso de peatonalización, la reordenación de la movilidad, la renovación de las redes de saneamiento y abastecimiento y la implantación de técnicas innovadoras de reducción de la temperatura que se enmarcan en un proceso de investigación en la adaptación al cambio climático y de cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Urbano Sostenible.

El sistema que se implantará en Macarena está diseñado por la Universidad de Sevilla y se basa tanto en la generación de espacios de sombra como en un proceso de reducción de las altas temperaturas a través del enfriamiento y almacenamiento de agua en unas conducciones que sirve posteriormente para la mitigar el calor. Este sistema será completamente autosuficiente y de hecho la energía se generará a través de unas placas solares instaladas en la cubierta del CEIP Arias Montano y se distribuirá y almacenará a través de un sistema de conducciones bajo tierra. El proceso de enfriamiento se aplicará sobre cuatro áreas que además contarán con elementos de sombra que reduzcan el calor. Concretamente, las zonas están ubicadas en el patio del colegio (que se configurará como un aula abierta); en la plaza ubicada entre las calles Manuel Villalobos y Doctor Jiménez Díaz; en la zona de juegos infantiles de la Plaza Manuel Garrido y en la marquesina para las paradas de autobús en la calle Manuel Villalobos.

Además de estas áreas de sombra y climatizadas, este proyecto incluye el desarrollo de un sistema de drenaje sostenible, fuentes y más arbolado y una reducción del vehículo privado generando un amplio espacio peatonal. En total, se intervendrá sobre una longitud de aproximadamente 900 metros.

Las obras contemplan la sustitución de las tuberías en el subsuelo, con el fin de aprovechar el agua, la colocación de unas “zanjas drenantes”, que permiten que una parte del agua de lluvia en vez de ir a la alcantarilla sea absorbida por el suelo, con lo que “se consigue recuperar los niveles freáticos de la ciudad”

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