EMASESA conmemora el Día Mundial del Retrete visualizando el problema de las toallitas húmedas en el saneamiento
Sociedad y prensa han visitado hoy la EDAR San Jerónimo para conocer de cerca el proceso de depuración de las aguas residuales y el grave problema que suponen las toallitas húmedas en la red de saneamiento
EMASESA recogió 755 toneladas de toallitas en 2023, lo que equivale a un gasto anual de 5 millones de euros.
En el Día Mundial del Retrete, EMASESA ha ofrecido a una visita a la EDAR San Jerónimo para evidenciar los graves problemas que las toallitas húmedas originan en la red de saneamiento.
Durante la visita, que ha contado la presencia de vecinos y representantes públicos de varios distritos de Sevilla, así como de la presidenta del Colegio de Administradores de Fincas de Sevilla, María Dolores Bernal, se ha subrayado el impacto económico, social y ambiental de los residuos sólidos en general y de las toallitas en particular.
De esta manera, EMASESA recogió 755 toneladas de toallitas en cauces y depuradoras durante 2023, los costes necesarios para la retirada y tratamiento de este residuo se elevan hasta los 5 millones de euros al año. Según la empresa, “estos residuos pueden tardar hasta 100 años en degradarse y, cuando llegan fuertes lluvias, pueden terminar en riberas, ríos y playas contaminando el entorno e introduciéndose en la cadena alimentaria”.
EMASESA también ha hecho hincapié en los tapones y atascos que las toallitas generan tanto en los bajantes de los domicilios como en las redes generales de saneamiento, provocando “estancamiento de agua y, por lo tanto, malos olores, problemas de salubridad, inundaciones e incluso cortes en el suministro de telefonía e internet al arrastrar los cables de fibra óptica”.
De EDAR a biofactoría
La visita también ha servido para explicar la transformación que ya se está aplicando a las estaciones depuradoras de aguas residuales para convertirlas en “biofactorías”.
En este sentido, el jefe de división de Producción de EMASESA, Enrique Baquerizo, ha señalado que EMASESA “se ha adelantado a la nueva normativa sobre tratamiento de aguas residuales cumpliendo con los futuros requisitos de tratamiento, neutralidad energética y recuperación de recursos, entre otros”. En este sentido, Baquerizo ha incidido la puesta en marcha de herramientas de transformación digital con inteligencia operacional y procesos innovadores como la codigestión, la hidrólisis térmica o la planta de compostaje avanzado de Copero, “para contribuir a obtener unos espacios de vida más saludables y fomentar la economía circular”.
Por su parte, Francisco José Juan, director de Sostenibilidad e Innovación de EMASESA, ha explicado el proyecto CREaNDO. Beneficiario de la segunda convocatoria PERTE, este proyecto contempla 17 actuaciones destinadas a la implantación de un nuevo modelo de gestión de sistemas de saneamiento en grandes entornos urbanos. “Con este proyecto, EMASESA pasará de una gestión reactiva del saneamiento, a una proactiva, dotando de mayor resiliencia a sus instalaciones y un mayor nivel de desempeño en la gestión de eventos pluviales e inundaciones”, ha señalado.
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