Emasesa invierte 13 millones en la reconstrucción sostenible de San Francisco Javier

Las obras de ampliación del tranvía hasta Santa Justa en su primera fase permiten acometer la renovación subterránea de toda la red de canalización de aguas, así como la construcción de un colector de cerca de 3 metros de diámetro que recoja las lluvias evitando las inundaciones recientes.

El primer tramo entre Camilo José Cela y Eduardo Dato está ya en uso ciudadano con la repavimentación total de acerados, la instalación de mobiliario urbano e iluminación, fuentes y plantación de parterres con árboles y arbustos. Se irán incorporando tramos a medida que avance la urbanización.

La empresa metropolitana de aguas, EMASESA, invierte 13 millones de euros en la reurbanización del recorrido de 1,4 kilómetros que hace la nueva plataforma del tranvía ampliado desde San Bernardo hasta la calle Luis Montoto en su primera fase, y especialmente en la renovación completa de la avenida San Francisco Javier y en su continuación por Luis de Morales. Se trata de una zona muy transitada considerada arteria principal de la ciudad y, por ello, con importantes necesidades históricas de renovación de redes de aguas, tanto de abastecimiento como de saneamiento, así como del conjunto urbano en superficie.

El proyecto en ejecución recoge la transformación de un espacio urbano degradado de fuerte tránsito diario de vehículos con vías de servicio y mediana, así como tramos de acerado en mal estado y escasa vegetación de sombra próxima a los edificios, en un nuevo bulevar verde y sostenible, con estructura moderna que prima el uso peatonal con grandes áreas de paseo, distribuye mejor los espacios y ubica un importante número de parterres y un total de 396 árboles a lo largo de toda la calle que permitirán que se convierta en una zona para la estancia impulsando la funcionalidad residencial, comercial, educativa, hotelera y de disfrute urbano.

En el primer tramo habilitado y abierto al tránsito peatonal y de acceso a los garajes de residentes entre las calles Camilo José Cela y Eduardo Dato, ya puede verse el resultado de la obra con la que además se persigue una reducción de emisiones próxima a las 2.000 toneladas de CO2 al año. Para ello, se usan pavimentos permeables y también aglomerado como superficie de rodadura en el carril bici garantizándose la permeabilidad del agua de lluvia, parterres con zonas de bioretención, alcorques corridos y amplias áreas de sombra y agua creando sistemas adaptados al cambio climático y de protección frente a inundaciones.

De hecho, es parte sustancial de toda la actuación es la construcción de un nuevo colector, de más de 3 metros de diámetro, de la cuenca sur para la canalización adecuada de las aguas pluviales, así como para la necesaria renovación de redes de saneamiento y abastecimiento así como en la canalización de las aguas de lluvia que produjeron recientes inundaciones a la altura de los centros comerciales existentes. Esta intervención es un proyecto de futuro que aborda uno de los grandes
problemas a nivel universal y local como es el cambio climático (sequías, lluvias torrenciales, etc.), dando solución a las incidencias que provoca en el entorno urbano y que son ocasionadas por las lluvias torrenciales, que originan inundaciones por el mal estado de las redes de recogida de pluviales que debido a su antigüedad se encuentran obsoletas.

Al final de la ejecución de las fases, Emasesa habrá instalado casi 3,4 Kilómetros de red de abastecimiento y otros 3,7 kilómetros de red de saneamiento en sustitución de conducciones en mal estado que datan en la mayoría de los tramos de la década de los 60, con graves problemas de degradación por el paso del tiempo. En la red de abastecimiento se incluye una red de riego para árboles nuevos y arbustos que incluye sistemas de goteo y aspersión, en función de la zona verde de que se trate.

Esta renovación de las redes de abastecimiento supone una mejora cualitativa en la presión y caudal de la red, además de la evitación de fugas indeseadas gracias al seguimiento y trazabilidad que permite su diseño donde es posible su sectorización y el control de ésta a través de la información enviada al Centro de Control y Planificación de Emasesa gracias a los sistemas de información digitalizados que se intercalan en la trama de la red.