Jaime Palop, Consejero Delegado de Emasesa, nombrado ingeniero del año.
Fuente: Europa press
23/12/2018
La Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos ha nombrado Ingeniero del Año 2018 al Consejero Delegado de Emasesa, Jaime Palop
La distinción se entregó el pasado día 20. La institución se refirió a Palop como “el ingeniero que quería ser astrónomo” y convirtió la ingeniería de caminos en “uno de los pilares de su vida”, debido a los consejos de su hermano, según ha destacado el Colegio en un comunicado.
Visiblemente emocionado, rodeado por su familia y ante “un salón lleno” de amigos y colegiados, el homenajeado admitió que siempre tuvo la “suerte de rodearse de gente muy valiosa”. “Esta forma de ver la vida me ha servido como mortero que aglutinó alrededor mía a gente de una inmensa valía que han hecho posible la magia de la ingeniería”, subrayó el premiado. Ser ingeniero le ha aportado, afirmó, herramientas, amparo, satisfacción, experiencias, “me ha permitido recorrer el mundo y ha sido una de las cosas más importantes de mi vida. Es un placer y un honor ser Ingeniero de Caminos”.
El Consejero Delegado de Emasesa, recogió el galardón de manos del decano de la Demarcación de Andalucía del Colegio de Ingeniero de Caminos, Luis Moral Ordóñez, quién realizó una pequeña reseña de sus logros y le destacó como el “ingeniero con inquietudes sociales” y “visionario de un futuro técnicamente avanzado en el mundo del agua.” Entre los logros de Palop, el decano destacó sus ideas que van más allá de la gestión a corto plazo, como la reciente creación de la Cátedra del Agua, base de una colaboración I+D+I Universidad -Empresa en la gestión y tecnología del agua urbana.
El homenajeado agradeció a la Demarcación y al Colegio el galardón que, aseguró , muchos otros grandes ingenieros habrían merecido antes que él, y a su familia el que le dé la fuerza y la energía que le permite seguir adelante y sin la que todo esto no sería posible. Envidió a los galardonados con los 25 años de profesión, momento al que le gustaría volver.
PERFIL DEL INGENIERO DEL AÑO 2018 –
Natural de Valencia, Palop afincado en la actualidad en Sevilla recibe a sus 59 años el mayor reconocimiento de sus compañeros en Andalucía. Desde marzo de 2016 ostenta el cargo de Consejero Delegado de EMASESA, pero su carrera profesional podría decirse que ha sido un caudaloso río de cargos públicos entorno a este líquido elemento.
Entre los principales puestos que ha desempeñado, ha sido director general de Obras Hidráulicas de la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio entre 1990 y 1994- donde también fue consejero ejecutivo en materia de Aguas-; presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en 2004; director general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente entre 2004 y 2008; y director gerente de la Agencia Andaluza del Agua de la Consejería de Medio Ambiente entre 2008 y 2009.
En la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ocupó otros dos cargos: de comisionario de aguas y jefe de la oficina de planificación. Su currículum se completa como secretario de las Conferencias de Directores Generales de Agua Iberoamericanos, presidente de la Comisión del Trasvase Tajo-Segura, presidente de la Comisión del Trasvase Negratín-Almanzora, responsable de la ejecución de los dos Acuerdos Andaluces por el Agua y gerente del Centro Nuevas Tecnologías del Agua.
En nombre de los compañeros que este año cumplen 25 años en la profesión habló José Luis López Ruiz, Director General de Operaciones de HYCSA en México. “Lo mejor que podría definir la trayectoria de todos nosotros es cambio, nuestra principal virtud es haber sabido adaptarnos al cambio: Cuando fue el momento de hacer grandes proyectos y obras con grandes presupuestos lo hicimos bien. Ahora que no hay obras aquí, las hacemos en el extranjero. Aprendimos a sobrevivir a la crisis”, dijo.
Sin embargo, López Ruiz reivindicó que los ingenieros no sólo tienen que sobrevivir, tienen que ser “factores catalizadores de cambios positivos, alzar la voz como colectivo y para ello son fundamentales instituciones como el Colegio de Ingenieros, y en particular la Demarcación de Andalucía, que ha sido el “pepito grillo” de nuestra sociedad en los asuntos que nos competen”.